Tudor ha lanzado este 25 de mayo de 2021 el nuevo modelo Black Bay Ceramic, un reloj extraordinario que culmina el saber hacer de la marca. Con este nuevo diseño se cubren todas las exigencias de aquellos más selectos. Para ello este reloj ha pasado por unas pruebas rigurosas para alcanzar una categoría superior. Podemos decir que Tudor ya cuenta con una acreditación de un organismo independiente que certifica la calidad TUDOR.
El nuevo Black Bay Ceramic adopta las agujas angulares distintivas de TUDOR conocidas como «Snowflake», presentadas en el catálogo de la marca del año 1969. La línea Black Bay, resultado de la sutil combinación de la estética tradicional y la relojería contemporánea, dista de ser una mera reedición de un clásico. Está firmemente anclada en el presente y aúna casi siete decenios de relojes de submarinismo TUDOR. Aunque parte de un diseño neovintage, sus técnicas de fabricación y su robustez, fiabilidad, durabilidad y precisión, así como la calidad de su acabado, superan las normas modernas del sector.
En cuanto a su calibre MT5602-1U presenta su acabado típico con la diferencia de que el Black Bay Ceramic es completamente negro, siguiendo la línea general del reloj. El diseño de este Calibre garantiza la resistencia y la precisión, al igual que su volante de inercia variable, mantenido por un robusto puente transversal con dos puntos de fijación.
EL RELOJ DE SUBMARINISMO TUDOR
La historia del reloj de submarinismo TUDOR se remonta a 1954, año del lanzamiento de la referencia 7922. Con una hermeticidad de hasta 100 metros, fue el primero de una larga línea de relojes de submarinismo. El modelo, de carácter asequible, resistente, fiable y preciso, representaba la filosofía del reloj herramienta de la marca. El reloj de submarinismo TUDOR se ha sometido a mejoras constantes, siendo aclamado de manera unánime por profesionales del sector, y fuerzas navales más importantes del mundo.